Esta majestuosa mansión en Granada necesitaba el equilibrio perfecto en la técnica fotográfica: transmitir la imponente atmósfera de grandeza que la casa merecía, manteniendo al mismo tiempo un ambiente hogareño y familiar. El efecto se logró combinando imágenes de la historia ancestral de la propiedad, como las ruinas del antiguo molino, los arcos de las antiguas murallas y la capilla de la casa, con reconfortantes imágenes de mesas bien servidas, elegantes dormitorios y la piscina, ideales para disfrutar del sol y la tranquilidad.

Se hizo especial hincapié en los impecables jardines y su diseño (los jardineros originales trabajaban en la cercana Alhambra) para mostrar la extensión y el mantenimiento del terreno. Los setos y las fuentes tomaron su forma del palacio de la Alhambra, por lo que queríamos capturar la esencia de la historia española en este impresionante jardín. Se utilizaron diversos objetivos en esta sesión, especialmente para conseguir los ángulos amplios necesarios para mostrar esta casa en todo su esplendor.