Este encantador apartamento era originalmente un taller de alfareros en la ciudad de Carataunas. El propietario y el diseñador de interiores han hecho un gran trabajo de restauración de la propiedad, manteniendo gran parte del carácter del edificio original: las baldosas rústicas, las paredes de piedra y los muebles antiguos, todo ello en consonancia con el uso original del edificio.

Teníamos que asegurarnos de captar el ambiente de la vivienda y mostrar los esfuerzos que se habían hecho para iluminar las zonas interiores. También queríamos captar algunos de los intrincados detalles que el propietario y el diseñador de interiores habían añadido al apartamento, especialmente algunas ideas para ahorrar espacio, como las puertas correderas.

El día del rodaje, el propietario nos proporcionó comida y bebida para utilizar en el rodaje, lo que nos facilitó la distribución, tanto en las mesas como en la superficie de la cocina.